SUTGDF-Sección 17
Y DESPUÉS DE LAS ELECCIONES ¿QUÉ?
En el mes de Agosto del año en curso, la Sección 17 del SUTGDF culminó su proceso de cambio de Comité Ejecutivo Seccional (CES). En medio de una intensa campaña los trabajadores integrantes de esta sección, en su mayoría adscritos a la Tesorería y a la secretaría de Finanzas del Gobierno del Distrito Federal, decidieron por mayoría de votos, como dispone el Estatuto de esta organización gremial, que los ganadores fueran los integrantes del actual CES, a cuyo frente está el compañero Pedro Lara Fuentes. Quien encabezó una alianza de diversas fuerzas actuantes en la mencionada sección sindical.
Como suele suceder, siendo candidato se comprometió a luchar por conseguir mejorías en los ingresos de los trabajadores, lograr que la capacitación que es un derecho de todos nosotros como empleados llegue a los niveles de base y no se quede en los estratos de estructura y favoritos de los jefes. Así mismo, dijo que no iba a tolerar el cierre de más centros de trabajo ni el desplazamiento de funciones del personal sindicalizado, entre otros puntos.
Todo se oye muy bonito, los trabajadores renovamos la esperanza en la organización sindical. Pero, debemos cambiar nuestra actitud. Ahora, después de la elección, el peor error que podemos cometer es seguir poniéndonos las camisetas de los colores con los que contendimos haciendo uso de nuestro derecho a elegir, lo cual también forma parte de la cultura democrática.
La división a ningún trabajador conviene. No prolonguemos desde la base la natural división de los momentos electorales.
Una vez contados los votos, la coyuntura electoral debe quedar atrás, los colores deben guardarse para las futuras contiendas y TODOS, que quede muy claro TODOS, tomemos conciencia de que una vez que la mayoría decidió a quien le depositó la responsabilidad de sacar a delante el destino de nuestra sección solo debe haber un gran grupo llamado con mucho orgullo SECCIÓN 17.
Pero, que quede también muy claro, no estamos pidiendo que de manera mágica borremos las naturales diferencias que existen entre los integrantes de la sección. Lo que sostenemos con toda convicción es que esas diferencias debemos debatirlas, discurrir y analizar nuestros problemas comunes con toda la entrega y pasión de la que seamos capaces; pero también, con todo el respeto y trato civilizado que debe merecernos siempre el compañero que comparte con nosotros los problemas de la vida laboral que tenemos en común, y que, no por haber participado en una planilla diferente debemos considerar nuestro enemigo.
En resumen, para quien esto escribe la esperanza se renueva. No de soluciones mágicas a mis problemas, mientras permanezco en mi escritorio maldiciendo el momento en que elegí al representante en turno. Espero sí, de parte de quienes ganaron, respeto fraternal para el que no fue favorecido por el voto mayoritario de los trabajadores y también para quienes lo apoyaron. En pocas palabras magnanimidad en la victoria y conciencia de clase.
Espero también de quienes no llegaron a la meta que se propusieron, respeto al trabajo de quienes ahora ocupan los cargos de representación por los que dignamente contendieron.
Madurez para asimilar este alto en el camino y para sumarse a las causas de la trabajadora, de la que, al final de cuentas, todos, pero absolutamente TODOS formamos parte.
Para RADIO PASILLO: Juan Antonio García Hernández.
